
El trastorno por atracón o Binge Eating Disorders (BED), en inglés, es uno de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) más comunes por personas de todas las edades. No obstante, se diagnóstica cerca de los 26 años aproximadamente.
Cuando hablamos de TCA, es común limitar la acepción del término a la anorexia y la bulimia. No obstante, aunque estos sean los casos más conocidos, existen otras muchas enfermedades y trastornos relacionados con problemas con la comida. Uno de ellos es el trastorno por atracón.
Es por ello que es importante saber cómo identificarlo y tratarlo en consecuencia. Desde Beatriz Verdi, especialistas en nutrición especializada en TCA, te contamos todo lo que debes saber acerca del trastorno por atracón.
¿Qué es el Trastorno por Atracón y por qué se caracteriza?
El Trastorno por Atracón es un trastorno de la conducta alimentaria relacionado con un problema con la comida. Su principal característica es la ingesta de manera compulsiva de una gran cantidad de alimentos en un periodo de tiempo breve.
La persona que lo padece suele realizar ingestas descontroladas de comida en corto tiempo, sintiendo culpa por ello.
Aunque el Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales edición 5 (DSM V), no lo describa, en nuestra práctica clínica y en múltiples investigaciones, se ha visto que puede haber dos tipos de conductas en las personas con este tipo de trastorno.
Por un lado, nos encontramos con personas que experimentan episodios de atracones, pero no necesariamente siguen restricciones alimentarias en las comidas posteriores.
Por otro lado, hay individuos que padecen ingestas compulsivas y, como respuesta, implementan restricciones alimentarias con el objetivo de contrarrestar lo que han consumido. Estas restricciones pueden abarcar desde la limitación de carbohidratos y grasas hasta omitir comidas y recurrir a ayunos prolongados, entre otras conductas. Además, algunos evitan las comidas posteriores no solo como un medio de compensación, sino también debido al malestar que experimentan tras los episodios de sobreingesta.
Cuando nos encontramos con personas que optan por restringir ciertos alimentos o incluso recurren al ayuno, es frecuente que surja la noción de que el trastorno por atracón no guarda relación con la necesidad física de nutrirse, sino que se trata solo de una manifestación de hambre emocional. En esta perspectiva, la comida se convierte en un mecanismo que les permite hacer frente a problemas emocionales profundos, como la ansiedad, el estrés, la tristeza y el miedo, convirtiéndose así en un escape emocional.
Sin embargo, esta realidad se entrelaza con otro aspecto: el hambre física y mental que surge como consecuencia de las restricciones alimentarias. Es importante comprender que al inicio del tratamiento, estos tres tipos de hambre coexisten y, a menudo, resulta complicado distinguirlo claramente. Recordemos que los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) son condiciones bio-psico-emocionales en las que todo está intrínsecamente vinculado, y una dimensión influye en la otra.
¿Cómo desde Beatriz Verdi Nutrición podemos ayudarte?
En primer lugar, trabajaremos en tu bienestar desde dos enfoques claves.
Por un lado, nos centraremos en tu cuerpo y cómo funciona desde adentro hacia afuera. Esto significa que a través de la nutrición y la alimentación, buscaremos restablecer el equilibrio en tu sistema biológico y fisiológico, que puede haberse desajustado debido a las restricciones alimentarias y los atracones . Algunos de nuestros objetivos es regular esas hormonas que controlan el hambre y la saciedad, y nutrir adecuadamente tu cuerpo, buscando un equilibrio interno.
Por otro lado, nos enfocaremos en tu mente y cómo procesamos la relación con la comida. Como dice Fiona Sutherland: se trata de trabajar “de arriba hacia abajo”, es decir, abordar el aspecto mental y las experiencias pasadas que has tenido en relación a tu cuerpo, la comida y la actividad física.
Como en la mayoría de los TCA, uno de los síntomas es la comida, las causas son multifactoriales, y siempre hay detrás otros síntomas subyacentes que debemos estudiar para entender por qué se produce este trastorno.
Nosotras no vamos a ahondar en tus emociones subyacentes, de esto se encargará tu psicoterapeuta, pero sí vamos a trabajar todo aquello qué está directamenre reacionado a la mala relación que tienes con la comida.
¿Quién puede sufrir este trastorno?
A veces se piensa que este trastorno alimentario y muchos otros, sólo pueden sufrirlo las personas con “sobrepeso/obesidad”. Es importante resaltar que cualquier persona, con cualquier composición corporal, peso o forma, puede padecer esta enfermedad. No es exclusivo de las personas con cuerpos grandes.

El Trastorno por Atracón afecta tanto a hombres como a mujeres, en mayor medida durante la adultez temprana entre los 21 a 26 años de edad, aunque puede comenzar en la adolescencia y pasar desapercibido. Muchas veces viene precedido de una anorexia o de una bulimia, porque muchas veces termina siendo un continium de los TCA.
¿Cómo sé si tengo un Trastorno por Atracón?
Un trastorno por atracón se caracteriza por los siguientes síntomas y episodios:
- Ingesta excesiva de alimentos
Como hemos comentado anteriormente, la persona que lo padece consume grandes cantidades de comida. Usualmente los atracones son por la tarde/noche, aunque algunos pueden presentarlos durante las mañanas.
- Falta de control
Hay un sentimiento de falta de control a la hora de ingerir la comida. La persona siente que no puede parar de comer, aunque quiera.
- Sentimientos de culpa y malestar
Después de comer, la persona siente sentimientos de culpa, vergüenza, y malestar, en general. Piensan que no tienen “fuerza de voluntad” y la verdad es que no tiene que ver con eso.
- Comer rápidamente y sin masticar
La persona que sufre este trastorno come casi de forma automática, sin masticar, saborear, y disfrutar de los alimentos. En ese momento es como si su cabeza y su cuerpo estuvieran desconectados.
- Esconder la comida
Otro de los episodios que se suelen dar en esta enfermedad es que la persona come en secreto, en su mayoría escondiendo la comida que ingiere, precisamente por esos sentimientos de vergüenza y culpa que le invaden al comer tanto en tan poco tiempo.
Factores de riesgo de sufrir Trastorno por atracón
Existen algunos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar este trastorno.
- Antecedentes familiares
Es probable que si padres o familiares tienen o han tenido a lo largo de su vida un trastorno alimentario, el hijo/a puede sufrirlo. La herencia genética aumenta el riesgo de desarrollar TCA.
- Dieta
Las personas que han hecho muchas dietas a lo largo de su vida suelen ser proclives a desarrollar este trastorno. Restringir calorías o alimentos durante unos días suele provocar la necesidad de comer en exceso, de aquí que pueda venir precedido de una anorexia.
- Problemas psicológicos
Como hemos comentado, hay ciertos factores como el estrés, la depresión, el estigma de peso, la gordofobia, la baja autoestima, una mala imagen corporal de uno mismo, etc., que suelen aumentar la probabilidad de desarrollar este trastorno.
¿Cómo identificarlo?
Una persona que sufre este trastorno suele ocultar su comportamiento, lo que resulta difícil detectar el problema para los padres/familiares e incluso para otros profesionales de la salud no especializados. Y aunque existen señales para detectarlo como las que hemos comentado, puede ser complicado, y no precisamente porque quieran ocultarlo sino porque piensan que pueden ser juzgados, es una forma inteligente de protegerse a los estigmas.
Si consideras que tu hijo/a o un ser querido puede padecerlo, habla con él de forma abierta. Es muy importante el apoyo y la comprensión familiar en cualquier TCA.
Similitudes y diferencias con la bulimia nerviosa
El Trastorno por Atracón guarda ciertas similitudes con la bulimia nerviosa, de ahí que algunas personas confunden ambos trastornos.
Guarda similitudes en la ingesta descontrolada de comida y su posterior sentimiento de culpa y rechazo. Sin embargo, en el trastorno por atracón no existen conductas compensatorias como el vómito o practicar ejercicio extremo, etc., que sí tienen lugar en los casos de bulimia.

¿Qué hacer para tratar el Trastorno por Atracón?
Para tratar éste y cualquier otro trastorno de la conducta alimentaria es crucial acudir a un profesional de la nutrición especializado en TCA. Aquí te dejo algunas claves para elegir a un buen nutricionista especializado.
En Beatriz Verdi Nutrición, estamos especializadas en Nutrición Clínica, en Trastornos de la Conducta Alimentaria, Alimentación Intuitiva e Imagen Corporal.
Contamos con más de 20 años de experiencia trabajando en los TCA con niños, adolescentes, adultos y sus familiares. Te acompañamos desde el primer momento del diagnóstico para evitar los ingresos hospitalarios, brindándote las herramientas que necesitas para lograr la recuperación total.
Durante estas dos décadas hemos salvado muchas vidas. Aquí puedes conocer algunos de los testimonios de pacientes y/o familiares.
También es importante combinar la atención de un nutricionista con la atención psicológica, para un tratamiento global. En Beatriz Verdi Nutrición colaboramos con profesionales de la salud mental para ofrecer un tratamiento integral y un mejor diagnóstico.
Si necesitas ayuda, no dude en contactarnos. Estamos para ayudarte a conseguir la recuperación total.